En el mundo hay dos tipos de personas, lo que piensan que invertir en bolsa es una gran idea para conseguir dinero, y los que opinan que es una inversión muy arriesgada.
En realidad, aunque el mercado de valores no ofrece inversiones 100% seguras, proporciona un equilibrio entre el riesgo y la rentabilidad muy ventajoso. Eso sí, se trata de un tipo de inversión para la que se necesita paciencia, pues habrá muchos obstáculos en el camino.
El tema que nos ocupa hoy es qué hacer cuando no se dispone del capital necesario para invertir en bolsa, y si merece la pena pedir un préstamo para invertir en bolsa.
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¿Qué es invertir en bolsa?
En primer lugar, hay que saber de qué hablamos, porque aunque todos hayamos oído la expresión «invertir en bolsa», puede que no todas las personas sepan en qué consiste realmente.
Invertir en bolsa trata de la compraventa de valores en los mercados financieros. Estos valores son los bonos y las acciones que emiten las empresas o incluso los propios países, para que sean adquiridos por las personas que participan en el mercado.
Un bono es un título emitido por una empresa, el Estado, o los gobiernos municipales o locales, para poder financiar su actividad. Gracias a estos bonos, los inversores obtienen el derecho de recibir ciertos pagos en el futuro, periódicamente.
Las acciones, en cambio, son títulos que proporcionan a quien los adquiere derechos sobre el patrimonio de los emisores.
Es decir, cuando se adquiere un bono, el inversor solo estará aportando capital a la empresa emisora, mientras que si lo que se hace es comprar acciones, se pasa a ser socio de la empresa, en el porcentaje correspondiente.
Antes de lanzarte al mercado de valores, debes tener en cuenta que el mercado de valores es muy volátil, y sufre muchos altibajos. Aun así puede ser una inversión que merezca la pena, pues la bolsa suele arrojar rendimientos muy buenos. Pero debes saber que para obtener un buen rendimiento, limitado los riesgos, la inversión debe realizarse a largo plazo y de forma gradual.
¿Cuánto dinero puedes necesitar para invertir en bolsa?
Actualmente, gracias a las innovaciones tecnológicas, resulta muy fácil hacer una inversión en bolsa, de hecho se puede hacer desde la comodidad del sofá, sin salir de casa. Este tipo de actividad se ha vuelto más popular, principalmente desde que han aparecido las aplicaciones de trading, que ayudan a quienes no tienen experiencia en el mercado a invertir de forma sencilla.
Una vez te has decidido a hacer una inversión en el mercado de valores, tienes que analizar sí dispones de la capacidad necesaria para hacerlo.
La Bolsa de Madrid, en sus recomendaciones, no especifica que se necesite una cantidad de dinero mínima para comenzar una inversión, pero en la realidad, es aconsejable crear una cartera de inversiones de al menos 1.000 euros.
Algunos inversores con experiencia, de hecho, recomiendan hacer una inversión de al menos 10.000 euros, si lo que se persigue es conseguir buenos rendimientos y ganar dinero. Excusan esta gran inversión, en que las pequeñas inversiones normalmente se ven consumidas por los gastos y comisiones que tendrás que costear, antes siquiera de obtener una mínima parte de beneficios.
La clave está en evaluar el dinero que se tiene disponible, es decir, dinero que no te sea necesario de forma inmediata para tu vida diaria, y que puedes permitirte perder.
Impera la idea de que cuanto más grande sea la inversión de capital inicial, más tranquilidad te proporcionará la inversión. Debido a esta razón, muchas personas que deciden participar en el mercado de valores tienen que buscar financiación.
¿Cómo conseguir financiación?
No hace mucho tiempo, los mercados de valores estaban disponibles solo para los grandes inversores que contaban con una importante cantidad de dinero de la que disponer y arriesgar.
En la actualidad, gracias a los préstamos y créditos, cualquier persona que pueda acceder a ellos (porque ha demostrado su solvencia y que no tiene deudas), tiene la posibilidad de invertir en los mercados de valores.
Por regla general, para pedir un préstamo, se necesita cumplir con ciertos requisitos. E independientemente de lo rigurosos que sean, es cierto que se tarda bastante en revisar y gestionar este tipo de solicitudes, de manera que no todo el mundo puede esperar a que aprueben su petición.
Hoy día también contamos con productos de financiación de concesión inmediata, que parecen creados apropósito para pedir un préstamo para invertir.
Existe mucha variedad en los créditos rápidos, cuyas condiciones y características dependen de la entidades prestatarias, e incluso el método de solicitar un préstamo para invertir se ha vuelto más sencillo al ser en línea.
Con este tipo de crédito para invertir, conseguir el capital necesario es muy sencillo, por lo que resulta una alternativa muy atractiva para muchos.
Otro método de conseguir financiación para hacer una inversión en bolsa es acudir al crédito público. Esto es, conseguir el dinero por otras fuentes, como el crowfunding, en el que un grupo de personas apoyará la inversión a cambio de algo.
Aunque no se trata de un método muy popular para este tipo de casos, no se pierde nada por intentarlo. Cada vez es más común encontrar diversos crowfundings con objetivos muy dispares. Y cuando el dinero que se invierte se va a usar para crear o mejorar un negocio, se puede pedir un crédito público amparado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores o CNMV.
Por último, la también existe la opción de obtener financiación a través del apalancamiento. Este apalancamiento consiste en obtener cierta cantidad de dinero que supera al capital disponible en la cartera de inversiones, y aunque no se tiene una obligación de ir pagando mes a mes, al aplicarse un tipo de interés, esos intereses devenidos sí que tendrán que ser abonados.
Tarde o temprano también se exigirá el pago del total prestado, y para entonces se deberán haber obtenido las ganancias esperadas en una inversión con éxito. Como ves, el problema principal es que la inversión no de buenos resultados.
¿Por qué los bancos son reacios a prestar dinero para inversiones en bolsa?
Veremos que actualmente las financieras se muestran más colaborativas a la hora de dar un préstamo o un crédito a quien lo solicite para crear una cartera de valores o ampliar la que ya tiene. Pero hasta hace poco tiempo eran las propias sucursales bancarias las que tenían serias dudas sobre la viabilidad de estas operaciones.
Los bancos se mostraban reacios a dar fondos para inversiones, sobre todo por los motivos.
Las acciones y los bonos no son tangibles
Una acción o un bono no son un activo tangible, es decir no disponen de un valor residual. De este modo, si la empresa o negocio en el que está invirtiendo sufre una caída de la bolsa y quiebra, el valor de la acción pasa a ser 0, y no podrás recuperar nada de tu inversión. Para la mayoría de los bancos, este es un riesgo inasumible.
Cuando una sucursal bancaria te presta dinero para hacer alguna compra grande, como una casa (como con una hipoteca) o un coche, hacen un análisis técnico de tu situación económica y financiera, para ver si podrás hacer frente a la deuda, pero en caso de que no puedas, o no la cumplas en plazo, se pueden quedar con la casa o el coche. Esto con los títulos como acciones o bonos, no es posible.
Invertir en el mercado de valores es un riesgo muy grande
El principal enemigo de los mercados de valores es el desconocimiento. Muchos asesores todavía desconocen cómo funciona la bolsa, o si lo conocen demasiado bien, saben que puede resultar muy complicado obtener grandes beneficios. Por eso, aun cuando estuvieran dispuestos a prestarte dinero para crear tu cartera de valores, si no saben cómo pagarás la deuda, no te dejarán el capital.
Normalmente cuando tu entidad bancaria te ofrece dinero para invertir, lo hacen para que lo hagas en sus productos, que te leves el dinero a otras empresas no supone ningún incentivo para tu sucursal.
Crédito o préstamo personal para hacer una inversión en bolsa
Hoy queremos centrarnos en la opción de pedir un préstamo para invertir con el banco, pues como ya hemos visto los créditos rápidos, los públicos y el apalancamiento son más sencillos de conseguir, aunque no por ello están libres de riesgos.
Después de la crisis económica que azotó el mundo en 2008, las sucursales no solían recibir solicitudes de préstamo o crédito para crear una cartera de valores, pero actualmente parece que la tendencia está cambiando. Hoy día muchos quieren aventurarse a invertir en el mercado de valores, y como necesitan financiar la aportación inicial, se dirigen a financieras.
Características de los préstamos bancarios para hacer una inversión en bolsa
Hay tantos préstamos personales como entidades bancarias, pero podemos encontrar algunos aspectos comunes a todos ellos:
- Duración
Los préstamos para invertir, no suelen tener una duración muy larga. Se suelen pedir desde 6 meses hasta 2 o 3 años.
- Comisiones
Para hacer más atractivos estos productos financieros, no se aplican la comisión de apertura ni la de cancelación anticipada.
- Tipos de interés
Cada entidad puede fijar el tipo de interés que quiera, pero es cierto que giran al rededor del 3,5%.
Cada entidad bancaria analizará la documentación que se presenta al solicitar un préstamo para invertir, y el departamento de riesgos es el que tiene la última palabra. Si dicho departamento califica la solicitud como poco factible o con un alto riesgo, la denegarán.
El préstamo para invertir que se consiga se puede destinar a recuperar liquidez sin tener que vender acciones o bonos; pero también para comprar más acciones, din tener que depender de dinero ahorrado.
Motivos por los que no es buena idea pedir un préstamo o un crédito para invertir
Hemos visto que pedir un préstamo para hacer una inversión en bolsa puede ser muy útil, cuando no se dispone del capital necesario, sin embargo ¿verdaderamente es buena idea?
Antiguamente era la propia entidad bancaria la que no aceptaba este tipo de solicitudes por el riesgo que suponen, pero como hemos señalado anteriormente, esto ha cambiado. Son las propias sucursales bancarias las que ofrecen ofertas productos financieros para costear esa clase de inversión.
Entonces, ¿deberías pedir un préstamo para invertir? Normalmente la respuesta en este caso es, como casi siempre, que depende. Si dispones del capital necesario para responder en caso de la que la inversión no salga bien, no tendrás ningún problema. Pedir un préstamo para realizar una inversión no es de las mejores ideas, cuando no se cuenta con el dinero suficiente.
Si necesitas pedir un préstamo para comenzar la inversión, porque no tienes ninguna otra fuente de financiación, los tipos de interés, las comisiones y demás gastos pueden acabar con los beneficios potenciales.
Además la necesidad de tener que ir devolviendo el préstamo mes a mes, puede llegar a obligarte a vender acciones al precio de ese momento. O lo que es peor, si no puedes hacer el pago de las cuotas, entrarás en situación de impago, y corres el riesgo de que te incluyan en algún fichero de morosidad.
La gran problemática que surge de pedir dinero prestado para costear una inversión es, como ya hemos apuntado, los tipos de interés. Estas tasas son el elemento esencial que determinará si la operación es rentable o no.
Si aún quieres pedir un préstamo para hacer tu inversión, intentaremos ayudarte en todo lo posible, así que sigue leyendo.
Cómo pedir un préstamo o un crédito para invertir
Antes de ver cómo pedir un préstamo cuando tenemos el objetivo de emplear el capital prestado para comprar acciones o bonos en los mercados de valores, hay que evaluar si es una alternativa adecuada.
Pedir un préstamo para invertir es totalmente lícito y factible, si se tienen presente ciertos elementos que indican si se tiene la capacidad de asumir el riesgo o no.
De esta forma, lo primero que se debe analizar es la posibilidad de cada uno para endeudarse, a este respecto, lo ideal es que la cantidad de dinero que se solicite, no sobrepase el 40% de los ingresos netos.
Al mismo tiempo hay que prestar atención a la capacidad personal de devolver el capital prestado. Es fundamental que cuando vayas a solicitar un préstamo, hayas analizado primero tu situación financiera, y seas realista a la hora de saber si puedes o no hacer frente a una deuda así.
Recomendaciones para pedir el préstamo o crédito para invertir
El primer elemento a tener en cuenta, es no pedir prestada una cantidad exorbitada de dinero. Cuanta más alta sea la cantidad, más riesgos implica la operación, por lo que se aplicarán tipos de interés, comisiones y gastos más elevados.
Otra gran recomendación es comparar distintas alternativas. Solicita información a tantas financieras como creas conveniente, o utiliza algún comparador de préstamos como el que tiene el Banco de España en su sitio web, o el de Rastreator.
Presta atención a tu economía, superar tu capacidad de endeudamiento puede tener consecuencias fatales a medio y largo plazo. Pues aun cuando hagas una gran inversión, de nada servirá si tienes que destinar todos los beneficios a costear el préstamo solicitado.
Alternativa al préstamo o crédito del banco
Si cuentas con ahorros suficientes, puedes hacerte un auto-préstamo. Es decir, usar parte de tus ahorros para comprar acciones ahora, e ir reponiendo esas cantidades con los rendimientos que se obtengan de las inversiones, en los meses siguientes.
En estos casos debes tomarte este auto-préstamo como uno realizado por el banco, pero con un tipo de interés del 0%, y unas posibilidades de pago más relajadas.
El principal problema de este tipo de autofinanciación es que la seguridad económica que brindaba esos ahorros, se ve muy reducida. Aunque la disminución en los fondos sea temporal, estás asumiendo un gran riesgo.
Para proceder con cautela, lo mejor es utilizar aquel dinero extra de los ahorros. Esto es, fijarte una cantidad de dinero como el fondo de ahorros, y todo lo que sobrepase de ella emplearla para invertir.
Al fin y al cabo es un dinero que ahora no está en uso, probablemente guardado para algo importante o para alguna emergencia. Además, el plan es recuperar ese dinero en los meses venideros, y de hecho, si la inversión tiene éxito, aumentarlo.
¿Qué hacer cuando ya se tiene el dinero necesario para crear una cartera de valores?
Si dispones del dinero necesario, bien porque lo has tomado prestado, o estás tirando de tus ahorros, solo te queda ver cómo realizar la inversión de tu fondo.
Actualmente existen diversas firmas o empresas que operan en internet que están dispuestas a actuar como mediadores, por lo que elegir el bróker adecuado también es una tarea a la que debes prestar atención.
Tienes que tener en cuenta unos factores esenciales cuando vayas a elegir a tu broker.
- Depósito mínimo
Lo primero en lo que debes fijarte es en el depósito mínimo que te soliciten. Encontrarás que muchos brokers online piden importes muy bajos para empezar a crear tu cartera de valores. En el comparador de brokers, Broker Comparador este es uno de los criterios más empleados.
- Cuenta demo
También es conveniente comprobar lo que se conoce como la cuenta demo, que es una cuenta de trading que generalmente proporciona las mismas funciones, características y condiciones de una cuenta de verdad, pero que operan con un dinero ficticio, para hacer una simulación de cómo funcionan.
- Subyacentes disponibles
Debes valorar si el broker que vas a contratar, trabaja con los subyacentes (bienes y demás valores) que te interesan. Aunque siempre tienes la posibilidad de confiar en su trabajo y dejar que elija los valores en los que invertir.
- Forma de operar
Antes de depositar tu confianza, y lo que es más importante, tu capital en sus manos, necesitas hacerte a la idea de cómo trabaja y se desenvuelve el broker. Esto te evitará desagradables sorpresas en el futuro.