¿Cuál es la regla de oro para pedir un préstamo personal?

A la hora de pedir un préstamo personal, los clientes deben tener en cuenta ciertos aspectos fundamentales que marcarán la diferencia en este tipo de procesos. Con ellos presentes, se podrán conseguir las mejores condiciones disponibles en el mercado, y obtener la financiación necesaria para invertir en nuevos proyectos o hacer frente a gastos inesperados.

Requisitos a la hora de solicitar un préstamo personal

Todos podemos imaginarnos las bases fundamentales necesarias a la hora de solicitar crédito. Pese a ello, es importante conocer al detalle el funcionamiento de este tipo de procesos, para que ningún matiz pueda cogernos por sorpresa y termine por empeorar las condiciones del contrato, o bien denegarnos la financiación.

Mayoría de edad

Para acceder a financiación en nuestro país, es imprescindible que certifiques tu mayoría de edad, puesto que las empresas no accederán a ofrecerte un préstamo si no has cumplido los 18 años. Sin este requisito en orden, no debes plantearte cumplir los demás, puesto que no tendrás ningún tipo de opción en este ámbito.

Documentación identificativa

La mayoría de edad se certifica con un documento de identidad en vigor, ya sea pasaporte, DNI o carnet de conducir. Además, con este podremos asegurarle al banco que nuestra situación en el país es totalmente legal, para evitar cualquier posible problema frente a la justicia en un futuro.

Información sobre el préstamo

La transparencia y la fiabilidad son dos términos que toda financiera comprobará antes de conceder un préstamo a algún cliente, independientemente de la cantidad que esté prestando. Por ello, todo crédito solicitado debe tener una finalidad clara y justificable.

El banco preguntará por la cantidad exacta de dinero que se quiere obtener por parte del cliente, y la finalidad a la que se va a destinar esta financiación. Si no tenemos una respuesta clara, es bastante posible que el préstamo termine denegado, puesto que nos tomarán como un cliente con alto riesgo de impago.

Capacidad de endeudamiento

Denominamos capacidad máxima de endeudamiento a la cuantía económica que un individuo puede gastar sin que ello implique algún riesgo importante para su salud financiera. Se calcula a través de un porcentaje, generalmente aproximado, utilizando la siguiente fórmula:

Cap. Endeudamiento = (Ingresos – Gastos) x 0,35

Con este resultado, la entidad bancaria puede saber la cantidad de deuda que podremos asumir, y tendrá mayor capacidad de decisión a la hora de determinar los plazos y las cuantías del préstamo.

Demostración de solvencia

Además de la capacidad de endeudamiento, también tendremos que cumplir con unos mínimos de solvencia, para que el banco comprenda que nuestra situación económica es óptima para hacer frente a la deuda en cuestión.

Este requisito es uno de los más importantes, puesto que todo prestamista necesita alguna garantía sobre la persona física o jurídica a la que va a entregar su dinero, para evitar impagos y problemas legales en un futuro.

Para justificar esta solvencia, tendremos que entregar un justificante de ingresos:

  • A los autónomos se les solicita la cuota a la seguridad social, el certificado de alta o la última declaración del IVA.
  • A los trabajadores por cuenta ajena se les pedirán las últimas nóminas.
  • A aquellos que no tengan un contrato de trabajo ni sean autónomos, pero que cuenten con ingresos recurrentes, deben justificarlos de alguna manera.

Garantías de devolución de deuda: avales

Este requisito también se considera uno de los más importantes, puesto que es el que facilita al banco una garantía en caso de impago. Si se incluye alguna de ellas en el contrato, ya sea algún bien o inmueble en propiedad del deudor, o bien algún avalista, las probabilidades de concesión del préstamo ascienden notoriamente.

Para el caso de un préstamo personal, especialmente si la cuantía no es muy elevada, es bastante habitual que no se exija ningún avalista. Simplemente, tendrás que responder de forma personal con tus bienes en caso de impago, y no debería haber ningún problema para recibir la financiación.

Si hablamos de grandes créditos, o préstamos para empresas, el aval es prácticamente obligatorio en estas operaciones. Cualquier otra persona física o jurídica puede avalar el préstamo, y es probable que el banco haga una pequeña investigación sobre cada avalista para confirmar su solvencia y reducir el riesgo general de la operación.

Declaración del IRPF

Entrando en la documentación requerida para recibir un préstamo, es muy común que se solicite una copia de la declaración a Hacienda. Esto se hace para comprobar la veracidad del importe de los ingresos, así como para confirmar que las obligaciones tributarias del deudor están en orden en el momento de concesión del crédito.

Contrato laboral

Para los trabajadores por cuenta ajena, muchos bancos piden una copia del contrato de trabajo, especialmente en préstamos importantes donde las cuantías son elevadas. La condición de indefinido es, en muchas ocasiones, la que termina dando el sí a la concesión de muchos créditos.

Condición de morosidad

De cara a evitar riesgos de impago, la entidad financiera verificará si tu nombre está registrado en las principales listas de morosos a nivel nacional, como RAI o ASNEF. Si este figura en alguna de ellas, será una condición excluyente para la gran mayoría de opciones, incluyendo todos los grandes bancos.

De la misma manera, también se suele exigir que el prestatario no tenga ningún tipo de deuda o préstamo por pagar en la actualidad, puesto que puede generar un conflicto a la hora de pagar las cuotas correspondientes al nuevo crédito.

Préstamos personales: dónde se solicitan y qué condiciones pueden favorecer la concesión

Ahora sabes los principales requisitos que todo individuo debe conocer antes de solicitar un préstamo personal. Cuando vayas a tomar la decisión y buscar una entidad, debes saber que puedes elegir entre las siguientes organizaciones:

  • Prestamistas privados. Son empresas de capital privado que ofrecen vías de financiación alternativas a las tradicionales. Generalmente son micropréstamos, préstamos online y minicréditos.
  • Entidades bancarias. La banca tradicional, ya sea nacional o extranjera, es la principal fuente de financiación en materia de préstamos personales.
  • Cooperativas y cajas de ahorro.
  • Plataformas de gestión de préstamos entre particulares.
  • Grandes superficies. Pese a que no te prestan dinero como tal, acostumbran a financiar la compra de determinados productos, ofreciendo tipos de interés muy bajos o nulos. Si necesitas el préstamo personal para la compra de algún electrodoméstico o artículo tecnológico, puede ser la mejor opción disponible para ti.

Cada entidad tiene sus condiciones y exigencias particulares, pero los requisitos mostrados anteriormente acostumbran a ser comunes para todas las solicitudes de financiación. Sin embargo, algunas organizaciones acostumbran a dar mayores facilidades a sus clientes a la hora de solicitar un préstamo, siempre y cuando acompañes el contrato con la compra de alguno de sus servicios.

Planes de pensiones, seguros y la domiciliación de la nómina suelen ser las opciones favoritas por parte del equipo bancario a la hora de ofrecer un complemento del préstamo personal solicitado por el cliente. En muchos de los casos, aceptar la contratación de este producto puede ser decisivo para obtener la financiación solicitada.



Hemos visto los requisitos imprescindibles a tener presentes antes de pedir un préstamo personal. Es recomendable contar con la documentación necesaria, realizar una búsqueda de información previa sobre las diferentes opciones y pactar unas cuotas óptimas para que la financiación se ajuste a las necesidades particulares de cada uno.