Préstamos para empresas

Poner en marcha una idea de negocio requiere de una buena planificación y de disponer de cierto nivel de recursos. Un préstamo para montar un negocio o una empresa puede ser de difícil acceso para muchos. Hoy en día todo el mundo quiere emprender y las entidades financieras son muy cuidadosas a la hora de asumir el riesgo de dar ese apoyo clave.

Actualmente existen muchas ayudas y subvenciones para autónomos y pequeños negocios además de préstamos sin aval, que sirven de financiación para abrir un negocio. ¿Quieres saber cómo las empresas consiguen financiación?

En este artículo te proporcionamos toda la información que puedes necesitar, desde las respuestas a las preguntas que tienes que hacerte antes de empezar la búsqueda de un préstamo, hasta cómo conseguir la financiación que necesitas.

Solicitud de crédito para empresas

Como se va a hablar de préstamos, no entraremos en conseguir financiación para tu proyecto de empresa por la aportación de capital por parte de inversores, las subvenciones o cualquier otra manera de conseguir financiación, que no sean créditos con entidades bancarias tradicionales.

Cuando comenzamos el proceso de encontrar soluciones de financiación para abrir un negocio, sin duda lo primero que nos viene a la cabeza, a la mayoría de nosotros, es acudir a la sucursal de nuestro banco para ver su oferta de créditos y pedir una propuesta de préstamo.

Pero no tienes que limitarte a tu oficina habitual, sino que deberías presentar tu proyecto a todas las oficinas bancarias que puedas. Por un lado maximizarás tus opciones, y por el otro, al comprobar la oferta de cada banco, podrás comparar precios y condiciones de las distintas propuestas y elegir la que más te guste.

Cualquier banca tradicional que financia a un cliente tiene dos prioridades:

  1. Asegurarse de que si por algún motivo, el cliente no puede pagar el crédito, recuperaran lo prestado. Es decir, quieren una garantía de que no van a perder dinero.
  2. Asegurarse de que tienes la capacidad y la manera para devolver el préstamo y pagar los intereses correspondientes. Esta prioridad es más complicada, ya que al empezar un proyecto de nueva empresa, aún no se conocen los ingresos de tu negocio.

¿Qué tipos de crédito para empresa existen?

Dentro del amplio catálogo de servicios financieros para empresas podrás hacer la solicitud de diversas modalidades que pueden ser más o menos útiles según tus necesidades:

Préstamos para empresas

Se trata de productos con los que se obtiene el importe completo al contratar el préstamo, pudiendo disponer de la totalidad del importe desde el inicio del plazo para utilizarlo conforme más convenga.

Una vez obtenido el importe, se pasará a devolver, normalmente en cuotas mensuales, en las que se incluye una parte de capital y otra de intereses. Pueden tener comisiones de estudio, de apertura y por cancelación anticipada total o parcial.

Las condiciones suelen ser muy personalizadas para cada negocio, por lo que pueden variar mucho de una empresa a otra, tanto en cantidad de dinero a obtener como en plazos, en comisiones y en tipos de interés.

Líneas o pólizas de crédito para empresas

En este caso, se establece un límite monetario máximo que los clientes pueden utilizar cuando quieran y conforme necesiten, teniéndolo siempre disponible para obtenerlo de forma inmediata llegado el momento.

Los intereses sólo se aplican sobre la cantidad adeudada y no devuelta aún, que irá devolviéndose también en cuotas mensuales. El dinero que ya ha sido devuelto puede volver a utilizarse mientras el contrato siga en vigor.

Las líneas de crédito son muy útiles para poder disponer de financiación rápida cuando surjan gastos e imprevistos. También para ir abordando pequeños gastos del día a día sin tener que utilizar la tesorería de la empresa.

Qué coste tienen los préstamos para empresas

El principal factor a tener en cuenta es la cantidad de dinero vamos a tener que desembolsar para poder acceder a el préstamo o línea de crédito para empresas, además del tipo de interés que van a aplicar.

En este sentido podemos encontrarlos con diferentes comisiones:

Comisión de estudio

Es la que te cobra el banco por analizar tus datos y que puede cobrarte incluso aunque finalmente no contrates su préstamo.

Comisión de apertura

Este gasto se cobra a los clientes al principio, una vez formalizado el contrato, para cubrir los gastos administrativos y burocráticos que supone para los bancos todo el proceso.

Comisión de amortización

Puede ser total o parcial y se aplica cuando los clientes devuelven de forma anticipada todo o parte del importe restante.

Comisión por cancelación anticipada

Se cobra al hacer la devolución de la deuda antes de tiempo, en concepto de los intereses que se van a dejar de percibir por terminan antes del plazo acordado.

Cuota anual

Este gasto se aplica en algunas líneas de crédito por el simple hecho de mantenerlas activas durante un plazo de tiempo.

SoluciónPor supuesto, cuantas menos comisiones cobre la banca en los préstamos para empresas, mejor será para ti. Es posible conseguir que la entidad no cobre ninguno de estos gastos, aunque normalmente se exige algún tipo de requisito o la contratación de otros productos.

Financiación para PYMES y autónomos

Las necesidades de financiación de Pymes y Autónomos son constantes: al principio para poner en marcha tu propuesta de negocio, más adelante cuando toca comprar nuevo material y expandir horizontes, para abrir un nuevo local, etcétera.

Lo más probable es que tus ingresos netos mes a mes no alcancen para cubrir estos objetivos de crecimiento, por eso es importante que tengas presente cuáles son los requisitos para solicitar un préstamo empresarial.

Tipos de préstamos disponibles para Autónomos y Empresas

Aunque dependen de la entidad financiera e incluso del sector de actividad al que te dediques, los tipos de préstamos que existen para Pymes y Autónomos son:

Préstamos bancarios

Un préstamo es la medida más común y rápida de conseguir cantidades extra de efectivo. Hablamos de dinero que el banco te presta sujeto a unas condiciones de devolución y un determinado tipo de interés.

Préstamos del Instituto de Crédito Oficial o líneas ICO

Un préstamo ICO es uno de los productos financieros enfocado a fomentar actividades empresariales y a financiar tu proyecto de empresa, como tales, ofrecen condiciones con más ventajas que los préstamos bancarios al uso. Entre ellas, plazos de amortización más largos y tipos de interés más reducidos.

Subvenciones

A menos que sean ayudas a fondo perdido, hay algunas subvenciones, estatales o autonómicas que estarán sujetas a condiciones de devolución.

Para que acudas a los bancos con los deberes hechos y salgas con el préstamo concedido en la primera visita, ten en cuenta las condiciones que te pondrán.

¿Qué condiciones tienen que cumplir las Pymes para acceder a un préstamo?

Antes de conocerte el préstamo, los bancos te pondrán una serie de requisitos relacionados con la solvencia de tu empresa para asegurar la viabilidad de la operación. Entre ellos, es probable que te pidan algún tipo de aval y que revisen con lupa cuestiones como:

Capacidad de pago y gastos fijos

El banco revisará las obligaciones financieras de la empresa así como el balance de ingresos y gastos para minimizar el riesgo que asume al prestarte el dinero.

Trayectoria de la empresa

No es lo mismo un préstamo al emprendimiento que un préstamo para ampliar capital o responder a una necesidad de financiación específica después de haber presentado beneficios.

No tener deudas con otros particulares o empresas ni haber incurrido en impagos

Esto es básico para demostrar la solvencia de la empresa y para justificarlo deberás presentar un certificado conforme a que no apareces en el Registro de Aceptaciones Impagadas (RAI).

IVA e IRPF

Tendrás que presentar la declaración del IVA, tanto del año anterior como del corriente, y la del IRPF del año anterior. También es necesario presentar un balance que muestre la facturación de la compañía, así como un justificante que acredite el pago del Impuesto de Sociedades (si se es una S.A., S.L por ejemplo).

Solución: la solicitud de financiación para iniciar un negocio depende de ti

Muchas personas comienzan su proyecto de empresa usando sus propios fondos. La cuestión de si deben hacer una solicitud de un préstamo para empresas y contraer una deuda, simplemente no tiene cabida porque pueden usar el dinero que han acumulado a lo largo de los años. Incluso si recurren a una forma externa de financiación, su propia contribución suele ser sustancial.

Ten en cuenta la información que te hemos presentado, y valora el uso de financiación para las necesidades de tus negocios.